HOMÍNIDOS Y EL AMBIENTE 

LOS HOMíNIDOS HIJOS DEL AZAR Y LA CATÁSTROFE

Es lógico pensar que entre los primates con posibilidades de sobrevivir, estaría aquel que la herencia le había hecho más apto, resistente y tolerante a inesperados cambios topográficos , climáticos ambientales junto con la cantidad y calidad de alimentación ,además de la capacidad de aprovechar cierto nivel elemental de comunicación con sus compañeros de grupo.

Se hace énfasis en que el hecho de la supervivencia  no se le debe “atribuir a un esfuerzo deliberado y voluntario” por sobreponerse a la dureza del entorno ,ni supuestamente a una predestinación dispuesta por entidades sobrenaturales; que lo empujaban hacía un futuro glorioso de amo del planeta.

La opinión que hoy prevalece es que este ser  todavía con mucho de animal como de humano, no fue sino el beneficiario afortunado del azar y fue únicamente el gestor de su trayectoria evolutiva ,en tanto que sus inmediatos parientes permanecían estacionarios o terminaban por extinguirse (Uribe,2001).